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En este puente, he decidido ir a Bezas, lugar donde me encuentro relajado y agusto.
Aprovechando unos días estupendos, había que sacarle partido yendo de lugar en lugar; vi los arbustos tan llamativos por su colorido, Joaquín aprovechaba el labrar, con la sazón de las últimas aguas caídas, un ejemplo de cómo se encontraban el Caloncho, y La Laguna.
Las aguas, han servido para ver algunos rebolloneros buscando, y otros dejan sus motos al lado del monte con la misma intención.
Como ya es sabido entró en vigor el día 1 de octubre una nueva tasa de recolecta de rebollones, estos vales dan derecho hacer uso con arreglo a lo establecido, las señales así lo acreditan. Y si vas en vehículo han de respetarse los caminos, donde se encuentran señales de estacionamiento, y en caso de salirse de las pistas principales debes de sacar un permiso para poder circular por los secundarios. (Estas medidas, no a todos les parece acertada)
Como puede verse en el Centro de Interpretación del Rodeno, también se aprovecha las mesas para reponer fuerzas, y si lo deseas puedes dar un paseo hasta Fuente Buena, por el camino adaptado para sillas, es de corto recorrido, viendo un puente, y otras vistas que dan pie a hacer alguna foto hasta llegar al merendero.
Las aguas también deterioran y se filtran por lugares que deben de ser reparados por el paso del tiempo y con los vehículos pesados que pasan se hace más necesario, ¡ aguantan más las puertas de antaño !
